L’Amuravela: Una Fiesta Única en Cudillero
L’Amuravela, celebrada cada 29 de junio en Cudillero, es una de las fiestas más originales y curiosas de Asturias, con un fuerte sabor marinero y un lenguaje propio, el pixueto, característico de los pescadores de la villa. Esta fiesta fue declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional y tiene sus raíces al menos en el siglo XVI, vinculada a la construcción de la iglesia parroquial de San Pedro.
Orígenes y Tradición
La celebración comienza con un sermón recitado en verso y en pixueto, un dialecto único de Cudillero, que resume los eventos del año de manera irónica y pide protección para el año siguiente. El sermón contiene referencias a la historia del pueblo, su tradición pesquera, su relación con el mar y sus raíces religiosas. Este acto se lleva a cabo en el pintoresco anfiteatro de Cudillero, donde las velas se despliegan al viento, rodeadas de un ambiente colorido y marinero.
El Ritual de l'Amuravela
- La primera parte: El sermón recitado en pixueto es el núcleo central de la festividad, en el que el recitador informa al patrón San Pedro sobre lo ocurrido durante el año.
- La segunda parte: Es un saludo festivo a través de maniobras con las velas, seguido por gritos de mando tradicionales como «¡Amura vela!», «¡isa vela!», «¡fuego a babor!», «¡fuego a estribor!». Esta parte tiene su origen en las celebraciones de los marineros que regresaban de expediciones marítimas, como la conquista de La Florida.
Las Festividades de San Pedro en Cudillero
Los días 28, 29, 30 de junio y 1 de julio, Cudillero celebra con gran fervor las festividades de San Pedro, patrón de la villa, junto con San Pablo y San Pablín, formando lo que los pixuetos llaman «el tridu de las fiastas». Durante estos días, el pueblo se llena de música, misas y procesiones.
- Misiones religiosas: El 30 de junio se celebra la Misa Sacramental y la procesión del Santísimo, mientras que el 1 de julio, se realiza una misa en el puerto y una procesión marinera en honor a los fallecidos.
- Bautizo pixueto: En la Fuenti’l Cantu se lleva a cabo un bautizo simbólico, donde los forasteros se vinculan al pueblo y a sus tradiciones.
Incidentes y Resistencia a la Tradición
A lo largo de su historia, L’Amuravela ha enfrentado suspensiones y altercados, especialmente por parte de los sacerdotes, debido al tono irreverente de algunos de los sermones. Sin embargo, la resistencia de los marineros y los habitantes de Cudillero ha logrado mantener viva esta tradición única. En 1946, la fiesta fue restablecida oficialmente, gracias al acuerdo entre las autoridades civiles y eclesiásticas.
Recitadores y Autores de l'Amuravela
Desde su resurgimiento en 1946, varios recitadores y autores han mantenido la esencia de L’Amuravela:
- Antón de la Colona fue el primero en recitar el sermón tras la restauración en 1946.
- Elvira Bravo continuó escribiendo los versos hasta 1986, convirtiéndose en una figura clave en la revitalización de la fiesta.
- Juan Luis Álvarez Bravo (Totó) y Cesáreo Marqués Valle han sido otros de los grandes recitadores y autores que han marcado el destino de esta tradición.
Un Futuro Asegurado para L’Amuravela
Hoy en día, L’Amuravela sigue siendo una fiesta vibrante y llena de vida, que atrae a miles de visitantes a la Ribera de Cudillero cada 29 de junio. Los versos del recitador siguen iniciándose con la frase:
«En el nombri de Jesús y la Virgin Soberana, vou ichar l'Amuravela, comu San Pedru asperaba.»
Con la bendición de San Pedro, la fiesta continúa siendo una muestra viva de la tradición, historia, y hospitalidad de Cudillero, asegurando que esta festividad perdure por generaciones.