El Festival del Esfoyón y Amagosto: Tradiciones Asturianas Revividas
En el corazón de Asturias, la localidad de Navelgas ha decidido preservar y promover las tradiciones más entrañables de su tierra a través del Festival del Esfoyón y Amagosto. Este evento, organizado por las entidades del movimiento vecinal de la zona, tiene como objetivo principal que las nuevas generaciones conozcan y vivan las costumbres de antaño, mientras los más mayores reviven momentos que forman parte de su identidad cultural. El festival pone en valor las labores y celebraciones ligadas al ciclo agrícola, como la recolección del maíz y las castañas.
Esfoyón y Amagosto: El Espíritu de la Recolección
Estos festejos tienen lugar en un momento clave del año, cuando el esfoyón (o esfoyaza) y el amagosto marcan el final del ciclo de las cosechas. La tradición de la esfoyaza consiste en deshojar las panoyas (mazorcas de maíz) bajo los hórreos y paneras del pueblo, lugares donde tradicionalmente se almacenaba el grano. Los jóvenes del pueblo se encargan de enristrar las panoyas, es decir, colgarlas en cordeles que decoran los corredores de las casas y hórreos. Esta actividad se acompaña de cánticos populares, que refuerzan el carácter festivo y comunitario del evento:
Cántico del Esfoyón:
No voy al esfoyón,
que me tiran panoyadas;
voy a ver la mio morena
que la quiero ver casada.
La panoya que m´embiaste
non la quise recibir,
porque mi madre non quier
que cortexe a un mozo ruin.
El amagosto complementa la fiesta con el asado de castañas, otro producto típico de la temporada otoñal en Asturias. El olor del fuego y las castañas asadas llena el ambiente, aportando un toque cálido y acogedor a la noche.
La Fiesta en el Corazón de la Comunidad
A lo largo del festival, los vecinos de Navelgas son los protagonistas. Son ellos quienes encienden los fornos de las casas y abren las puertas a los visitantes, transformando el evento en una reunión donde se comparten leyendas en torno a la tsariega, un asiento tradicional asturiano. Este aspecto de la celebración refuerza el espíritu comunitario y la transmisión de conocimientos y vivencias entre generaciones.
Durante la noche, el pueblo se llena de actividad. Además de las tareas agrícolas, se revive una serie de oficios tradicionales que antaño formaban parte de la vida cotidiana de la zona. Artesanos como el cesteiro (fabricante de cestas), el madreñeiro (fabricante de madreñas, los zuecos de madera típicos asturianos) y el herrero vuelven a mostrar sus habilidades en pequeñas demostraciones que conectan a los participantes con un pasado en el que estos oficios eran fundamentales para la vida diaria.
La celebración no estaría completa sin la música folclórica, que acompaña a las actividades y anima a los asistentes. Grupos de música tradicional asturiana, con gaitas y tambores, recorren las calles del pueblo y dan un toque festivo a cada rincón.
Un Año de Celebraciones
El Festival del Esfoyón y Amagosto es parte de una serie de celebraciones que la comunidad de Navelgas organiza durante todo el año, todas ellas vinculadas al ciclo agrícola. Desde la siembra y siega del trigo hasta la mallada (batido de los cereales), estos festejos permiten a los habitantes de la zona y a los visitantes conectar con la vida rural y las antiguas costumbres que aún perduran en esta parte de Asturias. Una de las celebraciones más importantes es el Día de los Pueblos de Asturias, que tiene lugar el último día de agosto y que incluye la tradicional mallada.
Conclusión
El Festival del Esfoyón y Amagosto no es solo una fiesta local, sino una ventana a las raíces de la vida rural asturiana. A través de actividades como el deshoje de las panoyas y el asado de castañas, se revive un ciclo agrícola que ha definido la vida de generaciones de asturianos. Este evento, que integra oficios tradicionales, leyendas y música folclórica, representa un vínculo entre el pasado y el presente, haciendo que las viejas tradiciones cobren vida para quienes participan en ellas, ya sea como protagonistas o como espectadores.